
DAR LA IMPORTANCIA QUE MERECEN A LAS IDEAS Y TENER EL VALOR DE HACERLAS VIVIR.
De la tela al diseño, del diseño al cuerpo, del cuerpo al movimiento y del movimiento a la expresión en un eterno retorno.
Me atrevo a sintetizar mi implacable bús- queda por la trascendencia en una simple pero com- pleja ecuación, vivir el ahora y ser feliz. Porque la humildad está en la verdad y esa es la que nos llevará a la auténtica satisfacción.
























